En el intercambio las comunidades compartieron su manera de organizarse para combatir algunos de los retos que enfrentan como consecuencia del cambio climático, entre ellos la poca accesibilidad y potabilidad del agua.
Photo: Zeidy Hidalgo
El Salvador, Enero 2017. El pasado 30 de enero como parte de las actividades implementadas por el proyecto AVE: Adaptación, Vulnerabilidad y Ecosistemas, se llevó a cabo un intercambio de experiencias en la Cuenca Binacional del río Paz (El Salvador-Guatemala), para conocer el modelo de gobernanza utilizado por la comunidad.
Asistieron veinte personas, líderes comunitarios de la Microcuenca del Aguacate, de la Comunidad de Bola de Monte y de Garita Palmera, todas ubicadas en el Municipio de San Francisco Menéndez, además del equipo técnico de La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, representantes de la Unidad Ecológica Salvadoreña -UNES- y de la Fundación Vida, radicada en Honduras, ambas organizaciones miembros de la UICN.
En el intercambio las comunidades expusieron como se organizan para combatir algunos de los retos que enfrentan como consecuencia del cambio climático, entre ellos la poca accesibilidad y potabilidad del agua.
Se visitó el manglar de Garita Palmera y se mostraron ejemplos prácticos de las actividades que realizan para la conservación del manglar. Actualmente en el río Paz se implementan medidas de Adaptación basadas en Ecosistemas tales como: reforestación del manglar, desazolve de canales y pesca sostenible; para monitorear el mantenimiento de las medidas que aplican, realizan un patrullaje periódico.
La visita fue liderada por la Asociación Comunitaria para la Protección Ambiental Marino Costero de Ahuachapán(ISTATEN). Un grupo comunal integrado por líderes comunitarios de Ahuachapán que vela por la protección de bosques salados y que centra sus acciones en: conservación ambiental, incidencia, uso racional de los recursos naturales y aumento de las capacidades comunales. Está integrada por tres comunidades: Bola de Monte, Garita Palmera y El Tamarindo.
Como cierre, los asistentes sostuvieron un diálogo abierto, por medio de preguntas y respuestas comentaron los problemas que enfrentan y como los resuelven a través de soluciones naturales de acuerdo a las características de cada uno de los sitios, además de como la participación de la mujer es importante y que se requiere para que puedan involucrarse aún más de acuerdo a la particularidad de cada país.
El proyecto AVE es financiado por la Iniciativa Internacional del Clima del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza, Construcción y Seguridad Nuclear de Alemania.
