En Sudamérica, la UICN cuenta con 106 Miembros, entre ellos están representantes gubernamentales y organizaciones no gubernamentales de amplia trayectoria; así como organizaciones internacionales con fuerte presencia en la región.
El reconocimiento internacional de la UICN la ha llevado a ocupar el rol de observador ante la Organización de las Naciones Unidades, dignidad no concedida a ninguna organización de conservación.
El asesoramiento científico de la Unión sustenta muchas convenciones internacionales, tales como el Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES), la Convención sobre el Patrimonio Mundial de la UNESCO y la Convención Ramsar sobre los Humedales de Importancia Internacional.
Ser Miembro de la UICN significa:
Ampliar su ámbito de influencia y voz colectiva
Las Resoluciones y Recomendaciones aprobadas cada cuatro años en los Congresos Mundiales de la Naturaleza de la UICN, y a través de la red de Comités Nacionales y Regionales, los Miembros de la Unión contribuyen a orientar e influenciar las políticas y actividades de conservación y desarrollo sostenible a escala nacional, regional y mundial.
La Unión maneja conocimiento y convoca a congresos regionales y mundiales y otras plataformas de discusión sobre asuntos de conservación. Estos espacios brindan la oportunidad de evaluar y debatir los desafíos de la conservación desde la perspectiva de gobiernos, sociedad civil, sector académico y sector privado.
Los Congresos Regionales y Mundiales de Parques, por ejemplo, son foros en donde se adoptan compromisos y lineamientos de política para el manejo de las áreas protegidas y dan lugar a la construcción de una agenda de trabajo en este campo.
Otro ejemplo de los espacios de interlocución, que la estructura de la Unión posibilita, es la discusión de temas políticos nacionales e internacionales como son las posiciones de los países frente a temas neurálgicos de las convenciones internacionales. Temas como la protección del conocimiento tradicional y el acceso y distribución de beneficios en el CBD, el tema de la deforestación evitada en el UNFCCC o el estatus de ciertas especies comercialmente importantes en CITES.
Fortalecer el trabajo en redes
Al ser parte de una asociación global, los Miembros tienen la posibilidad de compartir sus experiencias de trabajo y aprender de las experiencias de otros mediante la participación en diversas redes temáticas. En Sudamérica este proceso es especialmente relevante ya que siete países cuentan con un comité nacional de Miembros de la UICN. Existe además, un comité regional en el que participan tanto los Miembros institucionales como las comisiones técnicas y su rol es proporcionar los lineamientos estratégicos para el trabajo de la Unión en esta parte del mundo.
Acceder a conocimiento e incrementar capacidades
La Unión es la mayor red de conocimiento sobre conservación y desarrollo sostenible sustentada en las capacidades de sus Miembros, Comisiones de expertos y personal técnico de la Secretaría. Sus aportes están respaldados en miles de publicaciones (impresas y virtuales) que son accesibles a la comunidad conservacionista.
La UICN es autora de herramientas conceptuales de gran prestigio, tales como:
- Estándar de la UICN para la identificación de áreas clave para la biodiversidad: El propósito de este estándar (A Global Standard for the Identification of Key Biodiversity Areas; KBA por sus siglas en inglés) es ubicar y resaltar aquellos sitios que hacen una contribución significativa a la biodiversidad. El criterio KBA incorpora elementos de biodiversidad que van desde los niveles genético, de especies y de ecosistemas.
- Las Categorías para la definición de Listas Roja de Especies Amenazadas, metodología que ha servido para la definición del estado de conservación de especies a nivel mundial y para la realización de multiplicidad de libros rojos en ámbitos nacionales.
- La Lista Roja de Ecosistemas categorías y criterios de la UICN es un estándar global que reúne información sobre el estado de conservación de los ecosistemas, aplicable a nivel local, nacional, regional y global. El objetivo del protocolo es apoyar la conservación, el uso de los recursos y las decisiones de gestión, mediante la identificación de los ecosistemas amenazados de pérdida de biodiversidad. Las categorías y criterios de la LRE están diseñadas para ser ampliamente aplicables en todos los tipos de ecosistemas y áreas geográficas, ser transparentes, científicamente rigurosos y de fácil comprensión para políticos, tomadores de decisiones y el público en general.
- La Lista Verde de la UICN de Áreas Protegidas y de Conservación (LVAPC) tiene el objetivo identificar sitios que han tenido éxito en sus esfuerzos de conservación y destacándolos como modelos de éxito. La LVAPC estimula a compartir conocimientos, herramientas y prácticas para las áreas de conservación, con el objetivo final de mejorar la contribución que pueden aportar estas áreas para el desarrollo sostenible y la conservación de la naturaleza y todos los valores sociales, económicos, culturales y espirituales asociados.
- Las Categorías de Manejo de Áreas Protegidas de la UICN que proveen un marco de criterios para su clasificación en función de las actividades y uso de los recursos permitidos.
- Human Dependency on Nature Framework es uno de los nuevos productos del conocimiento que está siendo elaborado por la Comisión de Política Ambiental, Económica y Social de la UICN. El objetivo principal de esta herramienta es evaluar, documentar y comunicar el papel y la importancia de los recursos naturales no cultivados/silvestres para la seguridad alimentaria y la nutrición de las comunidades.
- Natural Resource Governance Framework (NRGF) es también un producto nuevo de conocimiento desarrollado por la Comisión de Política Ambiental, Económica y Social de la UICN cuyo objetivo es el establecimiento de normas y directrices que guíen a quienes toman decisiones sobre el uso de los recursos naturales y la distribución de los beneficios de la naturaleza. Esta herramienta está siendo desarrollada tomando como referencia un conjunto de valores y principios de gobernanza para para apoyar la toma de decisiones más justas. El documento de trabajo lo encuentra en este enlace: https://www.iucn.org/sites/dev/files/content/documents/nrgf_update.pdf
Asimismo, la UICN ha ayudado a 75 países a preparar e implementar estrategias nacionales de conservación de la biodiversidad.
Participar en la definición y ejecución del Programa
El Programa de la UICN es una expresión del esfuerzo colectivo de sus miembros pues es diseñado y aprobado en la Asamblea Mundial de Miembros que acontece cada cuatro años. En América del Sur los Miembros son llamados a involucrarse, no sólo en el desarrollo del programa sino también, en su implementación. De esta manera, los miembros son partícipes de proyectos e iniciativas de escala regional que alimentan el programa.
Ampliar su ámbito de influencia y voz colectiva
Otro ejemplo de los espacios de interlocución, que la estructura de la Unión posibilita, es la discusión de temas ambientales nacionales e internacionales para construir las posiciones de los países frente a las convenciones internacionales.