Un parasito está causando una mortandad masiva de una de las especies más emblemáticas del Mar Mediterráneo, la gran nacra Pinna nobilis. Diversas acciones se están emprendiendo para frenar su expansión en la región.
Los primeros indicios de mortalidad masiva de Pinna Nobilis fueron detectados en el sudeste de la península ibérica y las Islas Baleares a finales de 2016 y pronto se tuvieron más noticias de que la mortandad de las grandes nacras se iba extendiendo con gran rapidez a lo largo de otras zonas del litoral, causando su muerte. A día de hoy, esta mortandad masiva ha afectado a todas las poblaciones del litoral español (con un 99% de mortandad) y en varios puntos de Francia (Córcega) e Italia (Sicilia, Apulia y Campania). “Las observaciones de mortalidades masivas recientes en otras poblaciones de nacras al sur de Túnez y norte de Turquía, si se confirman en las próximas semanas, apuntaría al gran poder de propagación del parasito y la situación crítica en la que se podría encontrar la especie” comenta María del Mar Otero, experta marina del Centro de Cooperación del Mediterráneo de UICN. La gran nacra, endémica del Mediterráneo, es el molusco bivalvo más grande de este mar y se encuentra desde hace años incluida como especie de interés comunitario que requiere una protección estricta por la Directiva Europea Hábitats y como especie en peligro por el Protocolo de Áreas Especialmente Protegidas y Diversidad Biológica en el Mediterráneo del Convenio de Barcelona.
Expertos del LIMIA (Laboratori d'Investigacions Marines i Aqüicultura) perteneciente de la Dirección de Pesca y Medio Marino del Gobierno de Baleares, confirmaron que esta mortalidad masiva está causada por un nuevo parásito del género Haplosporidium que parasita en la nacra Pinna nobilis, alojándose en su aparato digestivo y contribuyendo a su debilitamiento hasta su muerte por inanición. Los expertos indican que aunque aún no está claro cómo el parasito se transmite y va afectando a poblaciones de nacras tan distantes, sus efectos son indudables. Acciones para mitigar extensión de la enfermedad A raíz de la alarmante situación, el año pasado la especie fue clasificada en España como En Peligro Crítico y desde entonces se ha implementado un programa nacional de rescate que ha logrado salvar algunos individuos en acuarios. Países como Italia y Francia, alertados de la situación, han reforzado sus programas de observación en sus costas y ya confirman episodios de mortandades masivas en varias localidades y su continua expansión.
Por otro lado, las poblaciones en lagunas marinas hasta el momento han sido menos afectadas por lo que pueden ser la esperanza para repoblar algunas zonas junto con individuos en acuarios.
“A día de hoy, no sabemos realmente cuál es la extensión de este problema en el Mediterráneo realmente, necesitamos entender esto y adelantarnos a la llegada del parasito si queremos salvar esta especie” comenta Maria del Mar Otero, experta marina del Centro de Cooperación del Mediterráneo de UICN.
“Las Áreas Marinas Protegidas son nuestros puntos principales de observación, ya que es donde nos podemos encontrar altas densidades de nacras. Mantenemos una red de observadores y gestores en estos espacios que nos alertan de cualquier indicio o cambio. El gran reto está todavía en identificar soluciones concretas para combatir esta potencial situación dramática” comenta Leonardo Tunesi del Instituto Italiano de Protección e Investigación del Medio Ambiente, Italia.
“Una vez las poblaciones se ven infectadas, la probabilidad de supervivencia de las nacras es casi nula, por lo que se necesita trabajar con antelación”, valora Maite Vázquez Luis del Instituto Español de Oceanografía.
Se cree además que el aumento de las temperaturas, también tiene incidencia en la afección de las nacras por lo que es previsible la expansión de las zonas afectadas a lo largo de este verano.
"Con el calentamiento de las aguas durante el verano, tememos que la parasitosis y la mortalidad continúen extendiéndose gradualmente a lo largo de nuestras costas, como acabamos de ver en Banyuls-sur-Mer hace una semana", aporta Leonardo Vicente de la Universidad de Aix-Marsella (IMBE) ) y del Instituto Oceonográfico Paul Ricard.
La UICN está impulsando una serie de acciones prioritarias que ayuden a una evaluación completa de la situación en todo el Mediterráneo y a establecer medidas urgentes. Entre ellas se recomienda misiones de monitoreo a lo largo de toda la franja costera, con mayor frecuencia durante todo el verano, evitar programas de translocación de nacras a otros lugares hasta confirmar que no tienen el parasito, la preparación de programas de rescate (recogida en acuarios y cría en cautividad para la futura repoblación con especies juveniles resistentes) y la identificación de focos de alta densidad de Pinna nobilis como áreas prioritarias para adoptar medidas que eviten la infección.