Se trabajó por medio de dos talleres para aplicar el derecho nacional e internacional para la gestión integral y sostenible del acuífero Ocotepeque-Citalá.
Photo: Carlos Rosal / UICN
San Salvador, Abril de 2017. Los talleres son parte de los esfuerzos sobre fortalecimiento de capacidades que promueve la fase II del proyecto GGRETA financiado por la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) y ejecutado por UICN con el apoyo técnico del programa hidrológico internacional de la UNESCO y cuyo objetivo fue dar a conocer y profundizar la temática vinculada con la legislación de aguas en Honduras y en El Salvador, en apoyo al diálogo y a la reflexión nacional para una futura cooperación transfronteriza entre ambos países sobre el acuífero antes mencionado que comparten en la región del Trifinio.
Los talleres fueron organizados en tres módulos; en el primero se presentaron todos los aspectos relacionados con las grandes tendencias en la legislación sobre aguas en el mundo, en el segundo módulo se abordó lo relacionado con el estado actual, problemática y avances: la legislación e institucionalidad en Honduras y El Salvador, finalmente el módulo tres se dedicó a analizar el derecho internacional de aguas transfronterizas y su vinculación con el derecho nacional de aguas en Honduras y en El Salvador.
En ambos eventos participaron más de cuarenta funcionarios de los Ministerios de Ambiente y Recursos Naturales y de Relaciones Exteriores de ambos países, Comisión Internacional de Límites y Aguas, Corte Suprema de Justicia, GWP y Universidad de El Salvador, Plan Trifinio, Mancomunidad Trinacional Río Lempa, y la Dirección General de Recursos Hídricos de Honduras.
En esta segunda fase del proyecto GGRETA se procura tener un mejor conocimiento de las características biofísicas, hidrológicas, hidrogeológicas, ambientales, de género y socioeconómicas del acuífero transfronterizo Ocotepeque-Citalá mediante nuevos procesos de generación de datos e información, evaluaciones de campo y monitoreos adicionales de los recursos en la zona del acuífero y de esa manera ampliar y profundizar el conocimiento sobre la importancia estratégica y vulnerabilidad de los recursos de agua subterráneos en la región transfronteriza que comparten Honduras y El Salvador.
Es clave lograr focalizar la atención de las autoridades políticas locales, regionales y nacionales de ambos países sobre la importancia estratégica que tienen los recursos hídricos subterráneos del acuífero antes mencionado para satisfacer las crecientes necesidades de agua para consumo humano, principalmente, pero también para la producción de alimentos y la seguridad alimentaria en la zona; ya que muchas de las fuentes superficiales han estado presentando año con año marcadas reducciones en sus caudales y el problema de escasez de agua a nivel comunitario y de las cabeceras municipales continua agravándose en esa región del Trifinio.
A nivel local y mediante diversos procesos de acercamiento, comunicación y difusión con los principales actores locales se han ampliado los procesos de creación y fortalecimiento de capacidades locales institucionales para comprender de mejor manera la dinámica de las aguas subterráneas en el acuífero Ocotepeque-Citalá; así como los niveles de contaminación y la vulnerabilidad ambiental en general a que está sujeto.
En ese contexto el proyecto GGRETA también busca mejorar el diálogo a nivel local, regional y nacional sobre la base de un mejor conocimiento y la disposición de compartir información por los dos países y con ello lograr fomentar la cooperación binacional. Por otro lado; mediante la creación de esquemas de gobernanza y el desarrollo de herramientas para una gestión ambiental y de las aguas subterráneas de manera integral y sostenible se espera contribuir a mejorar los medios de vida, el desarrollo económico, la igualdad de género y la sostenibilidad ambiental.
Como resultado de esos procesos se espera desarrollar una propuesta inicial para la integración e implementación de una plataforma multiactores que contribuya a definir, promover y poner en marcha actividades de uso y aprovechamiento de las aguas subterráneas del acuífero transfronterizo Ocotepeque-Citalá de manera consensuada entre las poblaciones de los países que lo comparten.
